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Cónclave 2025: comenzó la elección del nuevo Papa tras la muerte de Francisco I

Con la Capilla Sixtina como escenario central, este miércoles 7 de mayo se dio inicio al Cónclave 2025. Los cardenales electores ya están reunidos a puertas cerradas en el Vaticano para elegir al nuevo líder de la Iglesia católica. El cardenal decano pidió “elegir al papa que la humanidad necesita”.

La Iglesia católica vive una jornada histórica: este miércoles 7 de mayo comenzó oficialmente el Cónclave 2025, el proceso en el que los cardenales menores de 80 años se reúnen en la Capilla Sixtina para elegir al nuevo Papa. La convocatoria se da apenas dos semanas después del fallecimiento de Francisco I, quien murió el pasado 21 de abril a los 88 años tras un largo período de internación en Roma.

Durante la misa inicial en la Basílica de San Pedro, presidida por el cardenal Giovanni Battista Re —decano del Colegio Cardenalicio—, se invocó al Espíritu Santo mediante el canto del “Veni Creator”, como es tradición antes del ingreso al cónclave. Allí, Re llamó a los cardenales a discernir con sabiduría y “elegir al Papa que la humanidad necesita en estos tiempos de grandes desafíos para la fe y la paz”.

El cónclave, que se realiza en estricto secreto, comenzó tras cumplirse el período establecido por el derecho canónico: al menos 15 días y no más de 20 desde la vacante de la Sede Apostólica. Durante estas jornadas, los 140 cardenales con derecho a voto —todos menores de 80 años— se alojan en la residencia Domus Sanctae Marthae dentro del Vaticano, donde permanecerán hasta que se elija al nuevo Pontífice.

El proceso de votación es riguroso y simbólico. Se realizan hasta cuatro votaciones por día dentro de la Capilla Sixtina, cuyas ventanas son tapadas y donde se colocan inhibidores de señal para garantizar el aislamiento total. Las papeletas de cada votación son luego quemadas en una de las dos estufas de hierro instaladas en el lugar, generando una “fumata” que anuncia el resultado: negra si no hubo elección, blanca si finalmente se ha elegido un nuevo Papa.

Para ser consagrado como Sumo Pontífice, el candidato debe obtener al menos dos tercios de los votos, es decir, 94 de los 140 votos disponibles. Una vez alcanzado ese número, el elegido debe aceptar el cargo y escoger el nombre papal con el que será conocido.

Aunque no se sabe con exactitud cuánto durará este cónclave, desde el Vaticano confían en una definición ágil, dada la sintonía que hubo en las jornadas previas y la claridad del perfil que se busca para el nuevo líder espiritual de más de 1.300 millones de fieles católicos en el mundo.

Ahora, los ojos del mundo están puestos en la chimenea de la Capilla Sixtina. El humo blanco marcará el inicio de una nueva era en la historia de la Iglesia.