La cuenta regresiva para el Gran Premio de Emilia Romagna, el próximo 18 de mayo, viene acompañada de un fuerte rumor que ya recorre todo el paddock: Franco Colapinto podría regresar a la grilla de la Fórmula 1. El piloto argentino, actualmente reserva y tester de Alpine, estaría a punto de ocupar el lugar del australiano Jack Doohan, en un movimiento que el equipo todavía no confirma oficialmente, pero que se da por hecho puertas adentro.
Mientras Alpine guarda silencio, los indicios son cada vez más claros. Los resultados mandan, y los seis Grandes Premios que ya se corrieron en 2025 fueron un examen constante para Doohan, que no logró superar a su compañero Pierre Gasly, ni tampoco borrar la sombra de Colapinto, quien llegó a Enstone en enero bajo el ala de Flavio Briatore, actual asesor ejecutivo de la escudería.
Colapinto, que disputó su última carrera en la F.1 con Williams en 2024, se mantuvo en segundo plano, trabajando como soporte técnico y en simulador. Ahora, con 159 días fuera de las pistas, su regreso parece inminente. La comparación de rendimiento entre los dos pilotos juega en favor del argentino: Gasly supera a Doohan por 6-2 en clasificación, con una brecha promedio de 0,367 segundos.
Una butaca con fecha de vencimiento
La pulseada interna entre Oliver Oakes, jefe de equipo de Alpine, y Briatore inclinó la balanza. Oakes defendía a Doohan, su expiloto en las categorías formativas, pero la falta de resultados apuró las decisiones. Miami era el límite. Mientras Mercedes subió a Andrea Kimi Antonelli y Red Bull experimentó (sin éxito) con Liam Lawson, Alpine ahora parece seguir la misma estrategia: apostar por talento joven con roce en la categoría.
El argentino no era ajeno al radar del equipo, y su entorno ya trabaja en los detalles logísticos para su posible debut en la temporada. De confirmarse, Alpine deberá reorganizar sus roles internos: definir si Doohan se mantendrá como piloto de reserva y quién tomará su lugar en el simulador. Los nombres del estonio Paul Aron y el indio Kush Maini suenan con fuerza para completar el equipo.
Una leyenda que lo impulsa
La historia le reserva a Imola, un circuito cargado de leyenda y emoción, el escenario para el posible regreso de un argentino a la máxima categoría del automovilismo. Como dijo Briatore hace unas semanas: “La F.1 no espera a nadie. Hay que estar listo para cuando llega el momento”. Para Colapinto, ese momento parece estar muy cerca.