El gobierno de Javier Milei alcanzó uno de sus primeros objetivos económicos: la inflación de abril fue del 2,8%, la más baja desde mediados de 2022, según informó el INDEC. Este dato representa una señal clara de que el plan de estabilización impulsado por el Ejecutivo comienza a mostrar resultados concretos.
Tras asumir en un contexto de crisis y con una inflación que había superado el 200% interanual, el presidente libertario puso en marcha un plan de ajuste fiscal, sinceramiento de precios y una política monetaria restrictiva, con el objetivo de frenar la emisión y controlar el déficit. En lo que va del 2025, los precios al consumidor acumulan un alza del 11,6%, muy por debajo del ritmo que traía la economía meses atrás.
La desaceleración de los precios se dio en un contexto complejo: sin anclas tradicionales como tarifas subsidiadas o controles de precios, y con una liberalización parcial del mercado cambiario. Aun así, el Gobierno logró frenar una espiral inflacionaria que amenazaba con volverse incontrolable.
Los rubros que más subieron en abril fueron “Restaurantes y hoteles” (4,1%) y “Recreación y cultura” (4%), mientras que “Alimentos y bebidas no alcohólicas”, el ítem con mayor peso en el índice, subió solo un 2,9%.
Desde el Ministerio de Economía destacan que el proceso de desinflación será gradual pero sostenido, y que el objetivo de un dígito mensual ya está siendo superado antes de lo previsto.
“Estamos haciendo historia. En cuatro meses bajamos la inflación más de 15 puntos. El camino no es fácil, pero los resultados están a la vista”, señalaron desde el entorno del ministro Luis Caputo.
Con este dato, Milei refuerza su discurso de que la única forma de combatir la inflación es con equilibrio fiscal y sin emitir dinero, una receta ortodoxa que empieza a mostrar signos de éxito.
